Laureano Albán

El polémico y laureado poeta de las abundantes metáforas, docente y diplomático, embajador alterno ante la UNESCO, miembro de la Academia de la Lengua de su país, Laureano Albán nació el 9 de enero de 1942, en Turrialba, provincia de Cartago en Costa Rica, y creció escribiendo versos desde la temprana edad de siete años y admirando a Ruben Darío.

Estudió en la Universidad de Costa Rica, Filología y Lingüística, doctorándose en Nueva York. Junto a su amigo Jorge Debravo, cuatro años menor que él, que fue víctima en 1967 de un accidente fatal, y con quien compartió su vocación poética, fundó el Círculo de Poetas de Turrialba y luego, el Círculo de Poetas Costarricenses, en San José, capital de su país, que actualmente cuenta aún con su dirección. En 1967 publicó “Ese hombre” y en 1970 “Las voces” y “Poesía contra poesía”.

Creó junto a otros poetas un movimiento literario llamado Manifiesto trascendentalista. Se trasladó a España donde publicó “Herencia del Otoño” en 1980 que lo hizo acreedor del Premio “Adonais” de poesía. En 1981 se publicaron “La voz amenazada” y “Geografía invisible de América”. El primero se acreditó el primer premio del concurso organizado por la Universidad Nacional, llamado “Por una palabra”.

En Madrid, en 1981 ganó el concurso de Cultura Hispánica, y un año después, en Huelva, el Premio Hispanoamericano de Literatura. En 1983 obtuvo dos galardones en España, uno en Burgos, el “Premio Internacional de Poesía religiosa” y otro en León, “Premio Único de la VII Bienal de Poesía”. Ese mismo año fue premiado en Nueva York, y en 1986 obtuvo el Premio Centroamericano de Poesía “Walt Whitman”.

En 1995 escribió una enciclopedia en forma de poesía a la que denominó “Enciclopedia de las maravillas” editada en tres tomos. En San José de Costa Rica recibió el premio Aquiles J. Echeverría en 1996 .

Fundó en Madrid en el año 2000 otro grupo literario, el Trascendentalista de Aranjuez.

Publicó en 2005 “El Libro de los sabios que jamás han existido” y en 2006, “El peor de los pecados”.

Recibió el premio “Magón” en 2006, durante cuya ceremonia realizó un aparatoso discurso de 25 minutos, agradeciendo a unos; sus allegados, y reprochando a otros; los envidiosos que lo critican y a la prensa que lo había tenido olvidado.

En el año 2010 se publicó el cuarto tomo de la “Enciclopedia de las Maravillas”.